Un año más el ‘tsunami Patchwork’ arrasó en Sitges. Las predicciones hablaban de 25.000 visitantes a lo largo de los cuatro días de Feria y no se equivocaron. Hoteles llenos, bares y cafeterías a rebosar, y grupos de mujeres por cualquier parte de la localidad. En definitiva, un evento que genera un impacto económico en la ciudad cercano a los dos millones de euros.
La Feria Internacional de Patchwork de Sitges, organizada por la Asociación Española de Patchwork (AEP) es uno de los eventos de referencia a nivel mundial. En él desarrolla una feria comercial abierta al público, donde los expositores presentan sus últimas novedades. Este año, cuatro carpas concentraron toda la actividad comercial. En ellas, un mar de personas circulaba de un lado a otro, ávidas de conseguir el artículo más deseado.

El tsunani patchwork en Sitges
Telas, botones, materiales, máquinas de coser, libros… cualquier anhelo por parte de las compradoras se podía encontrar en los cuatro espacios habilitados. Lo que hacía muy difícil salir de cualquiera de ellos sin una bolsa repleta de futuros proyectos de patchwork.
De forma paralela, mayoristas, distribuidores e importadores mantienen reuniones con los comerciantes, para hacer llegar a todos los rincones de España las novedades del sector. Una carpa en la que solo pueden entrar los afortunados portadores de una invitación.
Las exposiciones, principal atractivo
Las aficionadas que acuden a Sitges durante la celebración de la Feria hacen un recorrido por las exposiciones. Para ello, el Ayuntamiento de la localidad cede varios edificios emblemáticos que se convierten en salas de arte. En ellas cuelgan los trabajos participantes en el concurso organizado por la AEP y otros quilts traídos especialmente para la ocasión. Una oportunidad única de ver de cerca trabajos absolutamente espectaculares.

Pulsera para entrar en las exposiciones
Y es que al margen de los ganadores de cada edición se pueden ver maravillas como La Casa Batllo realizada por Olga González y el equipo Apliquick. Uno de los grandes protagonistas de esta edición al que no le faltaba un solo detalle a lo largo y ancho de todo el quilt.

Casa Batlló

Detalle Casa Batlló
Y como no podía ser, el ganador absoluto del Festival Internacional de Patchwork 2019, el quilt Oriente en Occidente de Adriana Briones Calleja. Un trabajo que llamó muchísimo la atención por su colorido y la gran cantidad de elementos que se podían apreciar. Reflejando a la perfección cualquier calle del Barrio Chino de Nueva York. Un acierto que tuvo su recompensa.

Oriente en occidente
Sin duda, Sitges no defrauda. Puede gustar más o menos la distribución de las carpas, las novedades que traen los distintos comercios, pero es una feria que engancha. Por el clima de la localidad, que siempre ayuda, por la gente y el ambiente. Porque cada vez se escuchan más idiomas entre las compradoras y también entre las vendedoras. Y porque es una oportunidad para ver multitud de técnicas diferentes que aprender o perfeccionar.
El ‘tsunami patchwork’ es una de las mejores cosas que le puede pasar a una ciudad que se vuelca con el evento. Obligatorio volver.
*Si quieres ver más fotos de la exposición puedes hacerlo en nuestra página de Facebook de Patch World News.
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